Marca: Herman melville y
«Llamadme Ismael. Hace algunos años, no importa exactamente cuántos, con poco dinero en el bolsillo y nada que me interesara en tierra, pensé en hacerme a la mar y ver la parte acuática del mundo. Es una gran forma de alejarse de la melancolía y mejorar la circulación, pero no sé por qué se me metió en la cabeza embarcarme en un ballenero».
Las cookies que utilizamos son exclusivamente para poder analizar las visitas. Para más información, revisa nuestra política de privacidad. Al pulsar en "Aceptar", aceptas esta política de cookies.